Querido Padre Pascual
Estimado Padre Balbino
Sr. Presidente del Consejo de hermandades y cofradías
Queridos hermanos
Empezamos hoy una nueva andadura y no hay mejor sitio que la casa de la Virgen Nuestra Señora. Ella nos ha protegido desde el nacimiento de nuestra Hermandad. Ella quiso que en su Casa, hace ya casi 50 años, un fraile dominico fundara esta cofradía para dar culto a su Hijo. Ella sigue mirándonos con ojos misericordiosos y Ella será quien nos guíe durante estos cuatro años en que dirigiremos la Hermandad.
Habéis realizado Hace unos momentos un acto muy importante y de transcendencia para vuestras vidas y para el conjunto de personas que componemos esta Corporación. A veces no somos conscientes de la importancia de este acto. Hermanos, hemos jurado por Dios. Hemos jurado por Dios, el cumplir con nuestras obligaciones cada uno en el oficio que se nos ha encomendado. Ya comentamos que la hermandad necesita de nuestro esfuerzo y dedicación. No sólo tendremos que esforzarnos en cumplir con nuestras obligaciones dentro de la delegación que nos ha tocado gestionar, sino ayudar a otras delegaciones para hacer más llevadera la carga entre todos. Hoy os llamo a la responsabilidad. Son tiempos difíciles, generalmente hoy nadie quiere responsabilidades más allá de las estrictamente necesarias, por eso valoro vuestra decisión de formar parte de la Junta de Gobierno. Ánimo, el Señor nos ayudará. Es mucho el trabajo que debemos hacer. Ya sabéis que metas nos hemos marcado para estos cuatro años. Habrá que luchar para conseguirlas. Nadie nunca le ha regalado nada a esta hermandad, todo lo hemos conseguido con muchos sacrificios. Estaremos dispuestos una vez más a dar lo mejor de cada uno de nosotros.
Me quedé con una frase pronunciada por nuestro Director Espiritual, el Padre Pascual, en su homilía de la pasada Cuaresma. “La cofradía no debe ser una carga, es una Gracia”. Así debemos tomarla, como una gracia. Y otra frase, Esta del evangelio, y que nos recuerda siempre nuestro hermano Pepe Allely. “Demos gratis lo que gratis recibimos”. Creo que cualquiera de las dos nos sirven hoy como llamada y como recordatorio de lo que haremos a partir de hoy.
Vida interna, Caridad, Formación y Juventud. Estos son los cuatro pilares del programa que presentamos en nuestra candidatura y que los hermanos han apoyado y refrendaron dándonos su confianza. Hoy pasan de ser un proyecto a una realidad que va tomando forma.
Mis últimas palabras deben ser de agradecimiento. En primer lugar a los asistentes a este acto. Especialmente a nuestro párroco. Vuelvo a mostrar nuestro compromiso en colaborar en todo lo que esté en nuestra mano. Encontrará usted en la Sacramental de la Sagrada Cena una parte más de la parroquia dispuesta a trabajar en pos de ella. Al presidente del Consejo por esta muestra de cariño hacia la Hermandad. Al Padre Pascual, siempre dispuesto a permitir que podamos desarrollar nuestra labor.
Quiero ahora agradecer públicamente y de todo corazón, la labor inmensa de un hermano, que tras muchos años de servicio termina hoy su mandato de hermano mayor y pasa a ser un humilde nazareno blanco. Benjamín, muchas gracias. Has demostrado siempre ser un caballero. Has amado y trabajado como el que más por esta Hermandad. Tu aportación es grandísima. Sabes que te echaremos de menos. Te echaremos de menos pero sólo en las reuniones de la Junta de gobierno, en el resto no porque sabemos que estarás con nosotros colaborando y apoyándonos. Gracias, ya sabes que seguiré contando contigo.
Hermanos que el Señor os bendiga, yo solo espero poder decirle dentro de cuatro años, Señor, no he perdido ninguno de los que me diste. Esa es mi meta personal.
Mirarlo, está con nosotros, con sus brazos abiertos, nos ofrece su cuerpo y su sangre, es poco pago el que nos pide, seámosle fieles todos los días de nuestra vida. Amén
José María Caro Pérez
Hermano Mayor
Estimado Padre Balbino
Sr. Presidente del Consejo de hermandades y cofradías
Queridos hermanos
Empezamos hoy una nueva andadura y no hay mejor sitio que la casa de la Virgen Nuestra Señora. Ella nos ha protegido desde el nacimiento de nuestra Hermandad. Ella quiso que en su Casa, hace ya casi 50 años, un fraile dominico fundara esta cofradía para dar culto a su Hijo. Ella sigue mirándonos con ojos misericordiosos y Ella será quien nos guíe durante estos cuatro años en que dirigiremos la Hermandad.
Habéis realizado Hace unos momentos un acto muy importante y de transcendencia para vuestras vidas y para el conjunto de personas que componemos esta Corporación. A veces no somos conscientes de la importancia de este acto. Hermanos, hemos jurado por Dios. Hemos jurado por Dios, el cumplir con nuestras obligaciones cada uno en el oficio que se nos ha encomendado. Ya comentamos que la hermandad necesita de nuestro esfuerzo y dedicación. No sólo tendremos que esforzarnos en cumplir con nuestras obligaciones dentro de la delegación que nos ha tocado gestionar, sino ayudar a otras delegaciones para hacer más llevadera la carga entre todos. Hoy os llamo a la responsabilidad. Son tiempos difíciles, generalmente hoy nadie quiere responsabilidades más allá de las estrictamente necesarias, por eso valoro vuestra decisión de formar parte de la Junta de Gobierno. Ánimo, el Señor nos ayudará. Es mucho el trabajo que debemos hacer. Ya sabéis que metas nos hemos marcado para estos cuatro años. Habrá que luchar para conseguirlas. Nadie nunca le ha regalado nada a esta hermandad, todo lo hemos conseguido con muchos sacrificios. Estaremos dispuestos una vez más a dar lo mejor de cada uno de nosotros.
Me quedé con una frase pronunciada por nuestro Director Espiritual, el Padre Pascual, en su homilía de la pasada Cuaresma. “La cofradía no debe ser una carga, es una Gracia”. Así debemos tomarla, como una gracia. Y otra frase, Esta del evangelio, y que nos recuerda siempre nuestro hermano Pepe Allely. “Demos gratis lo que gratis recibimos”. Creo que cualquiera de las dos nos sirven hoy como llamada y como recordatorio de lo que haremos a partir de hoy.
Vida interna, Caridad, Formación y Juventud. Estos son los cuatro pilares del programa que presentamos en nuestra candidatura y que los hermanos han apoyado y refrendaron dándonos su confianza. Hoy pasan de ser un proyecto a una realidad que va tomando forma.
Mis últimas palabras deben ser de agradecimiento. En primer lugar a los asistentes a este acto. Especialmente a nuestro párroco. Vuelvo a mostrar nuestro compromiso en colaborar en todo lo que esté en nuestra mano. Encontrará usted en la Sacramental de la Sagrada Cena una parte más de la parroquia dispuesta a trabajar en pos de ella. Al presidente del Consejo por esta muestra de cariño hacia la Hermandad. Al Padre Pascual, siempre dispuesto a permitir que podamos desarrollar nuestra labor.
Quiero ahora agradecer públicamente y de todo corazón, la labor inmensa de un hermano, que tras muchos años de servicio termina hoy su mandato de hermano mayor y pasa a ser un humilde nazareno blanco. Benjamín, muchas gracias. Has demostrado siempre ser un caballero. Has amado y trabajado como el que más por esta Hermandad. Tu aportación es grandísima. Sabes que te echaremos de menos. Te echaremos de menos pero sólo en las reuniones de la Junta de gobierno, en el resto no porque sabemos que estarás con nosotros colaborando y apoyándonos. Gracias, ya sabes que seguiré contando contigo.
Hermanos que el Señor os bendiga, yo solo espero poder decirle dentro de cuatro años, Señor, no he perdido ninguno de los que me diste. Esa es mi meta personal.
Mirarlo, está con nosotros, con sus brazos abiertos, nos ofrece su cuerpo y su sangre, es poco pago el que nos pide, seámosle fieles todos los días de nuestra vida. Amén
José María Caro Pérez
Hermano Mayor
