El pasado domingo 3 de julio y como colofón al Triduo Solemne a Jesús Sacramentado organizado por Nuestra Hermandad, se llevó a cabo la procesión con Su Divina Majestad por las naves del convento de Santo Domingo y el claustro del mismo. Previamente a la procesión se celebro la Función Solemne presidida por Fray Pascual Saturio Medina, Director Espiritual de Nuestra Hermandad, siendo este ayudado por N.H. Fray Juan Franco Pérez, del Convento de los Predicadores de Valencia.
Nuestra Hermandad recuperaba así el Corpus Dominicano, privilegio concebido por la Santa Sede a los conventos de la Orden de Santo Domingo, con la procesión del Señor en la Custodia, acontecimiento que no se celebraba desde el año 2006. Para la procesión se engalanó el claustro del convento con numerosos reposteros y banderas, y los pozos fueron exornados con flores, uvas y espigas. Así mismo se instalaron 3 altares, montados por la Hermandad de Cigarreras, presidido por la imagen del Niño Jesús de la misma, otro instalado por la Familia Real Guerreo con diversos enseres del convento y de nuestra Hermandad, presidido por una bellísima imagen de la Divina Pastora, y el altar central del claustro donde se situaba Nuestra Titular, María Santísima Reina de Todos los Santos. Así mismo fue engalanado para la ocasión el retablo de Nuestra Hermandad, acompañando a la imagen del Señor del Milagro la de San Juan y San Pedro.
El cortejo de la procesión eucarística lo abría el muñidor y justo detras el Guión Sacramental portado por monaguillos, al que le seguían numerosos hermanos portando codales con cera roja. Le seguían a estos el cuerpo de acólitos, un hermano portando el lábaro sacramental perteneciente a la Esclavitud del Santísimo, dos servidores con faroles y S.D.M. bajo el palio de respeto. Tras el Señor, numerosos fieles. A la conclusión se llevo a cabo la Bendición y Reserva acompañado de un repique de campanas, para anunciar una de las fiestas grandes del convento.
Una vez mas nuestra Hermandad pone de manifiesto la importancia de celebrar con la mayor gloria posible los cultos al Señor Sacramentado, siendo este uno de los fines principales de nuestros estatutos, con el Triduo Solemne con exposición de S.D.M., la Vigilia de Adoración y la Procesión del Corpus Dominicano, que se une a los numerosos cultos que se llevan a cabo durante el año en honor al Santísimo Sacramento del Altar.
Nuestra Hermandad recuperaba así el Corpus Dominicano, privilegio concebido por la Santa Sede a los conventos de la Orden de Santo Domingo, con la procesión del Señor en la Custodia, acontecimiento que no se celebraba desde el año 2006. Para la procesión se engalanó el claustro del convento con numerosos reposteros y banderas, y los pozos fueron exornados con flores, uvas y espigas. Así mismo se instalaron 3 altares, montados por la Hermandad de Cigarreras, presidido por la imagen del Niño Jesús de la misma, otro instalado por la Familia Real Guerreo con diversos enseres del convento y de nuestra Hermandad, presidido por una bellísima imagen de la Divina Pastora, y el altar central del claustro donde se situaba Nuestra Titular, María Santísima Reina de Todos los Santos. Así mismo fue engalanado para la ocasión el retablo de Nuestra Hermandad, acompañando a la imagen del Señor del Milagro la de San Juan y San Pedro.
El cortejo de la procesión eucarística lo abría el muñidor y justo detras el Guión Sacramental portado por monaguillos, al que le seguían numerosos hermanos portando codales con cera roja. Le seguían a estos el cuerpo de acólitos, un hermano portando el lábaro sacramental perteneciente a la Esclavitud del Santísimo, dos servidores con faroles y S.D.M. bajo el palio de respeto. Tras el Señor, numerosos fieles. A la conclusión se llevo a cabo la Bendición y Reserva acompañado de un repique de campanas, para anunciar una de las fiestas grandes del convento.
Una vez mas nuestra Hermandad pone de manifiesto la importancia de celebrar con la mayor gloria posible los cultos al Señor Sacramentado, siendo este uno de los fines principales de nuestros estatutos, con el Triduo Solemne con exposición de S.D.M., la Vigilia de Adoración y la Procesión del Corpus Dominicano, que se une a los numerosos cultos que se llevan a cabo durante el año en honor al Santísimo Sacramento del Altar.